
Recientemente he sido testigo de, al menos, un par de polémicas a cerca de piezas publicitarias de dudosa autoría creativa. De la primera tuve conocimiento a través de Facebook. Una amiga es directora de una escuela creativa, y tras anunciar que alumnos suyos habían ganado un Young lion de Cannes apareció uno de sus conocidos alegando el parecido de la pieza con una que una agencia Tailandesa (si no recuerdo mal) había sacado hacía años. Yo fui testigo involuntario y no quise opinar, pero a la vista estaba que las gráficas eran calcadas. (Si la puedo encontrar la añadiré a esta entrada. Si no, creedme.)
Los jóvenes autores decían no haber copiado. Y creo en su inocencia. ¿Habían visto de pasada esa gráfica y permanecía oculta en un rincón de su incosciente?
Además, ambas estaban basadas en las peripecias de un artista con los billetes. ¿Conocían al artista y les sirvió de inspiración?
En el mundo de las ideas todos podemos llegar al mismo sitio, y con frecuencia se da que se suele hacer en momentos cercanos en el tiempo y distintas partes del planeta. (Se habla de que la invención del cine o la bombilla se dieron simultáneamente en distintas partes del mundo, aunque la autoría del invento solo pueda atribuirse a un inventor.) "Si fuerais los inventores de Facebook habríais inventado Facebook", le dijo Zukemberg a sus ex-amigos.
Hace unos días, vi en Esquire la misma polémica, pero esta vez al revés. Se acusaba a la agencia grande de haber copiado a los jóvenes ganadores de un premio unos meses antes. Está polémica sí que la podéis ver aquí. Son realmente parecidas y sí que parece una idea copiada. Pero, ¿es realmente una copia? ¿Podrían haberse inspirado en la misma cosa para hacer un anuncio acerca del interés de Ikea por conservar el medio ambiente?
Pues me puse a indagar y encontré algo que perfectamente podía ser la base de la idea. Un artista que hace años ya hacía mobiliario con cartón: Folschool.com
Yo no sé qué creer, pero hoy en día con el todopoderoso Google, es tan fácil copiar como coincidir en una idea, como inspirarse en lo mismo o como que te acusen de copiar. Sin ir más lejos este post no parece más que una copia de mi comentario en la entrada de Esquier. Que venía a decir lo mismo (afortunadamente, yo me copio cada vez que quiero).
La copia, el parecido razonable, como quieras llamarlo, siempre ha existido en publicidad. Si queréis comprobarlo: Joe La pompe.
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